Mentiras disfrazadas de logros: El informe de Layda será otro montaje propagandístico

Después del informe de Layda Sansores, la expectativa entre los ciudadanos es de frustración y escepticismo. De acuerdo con información que llegó a esta redacción, filtrada por los mismos trabajadores del gobierno estatal, las cifras de el informe presentado por Layda no solo están maquilladas, sino brutalmente aumentadas, algo que hace pensar a la ciudadanía: ¿qué se ha hecho con tanto recurso si el pueblo de Campeche no ha sido beneficiado?

El documento que se presentó como "informe" está repleto de datos alterados para dar la impresión de que Campeche ha avanzado, cuando en realidad el rezago es evidente. Las calles siguen rotas, los hospitales colapsados y los ciudadanos abandonados. Ni en obra pública, ni en desarrollo social, ni en infraestructura educativa hay resultados visibles.

A través de redes sociales, cientos de campechanos han expresado su hartazgo, acusando al gobierno de usar el presupuesto para alimentar una campaña permanente de imagen. Lejos de atender los problemas reales del estado, el equipo de Sansores ha enfocado su energía en producir videos, espectaculares y anuncios triunfalistas que no reflejan la vida cotidiana de la población.

Incluso trabajadores del gobierno estatal han denunciado internamente que son obligados a participar en actos públicos para simular apoyo popular, mientras que en sus oficinas enfrentan recortes, falta de equipo y desorganización. El informe, más que una rendición de cuentas, resultó ser una nueva simulación orquestada desde el poder.

La gente en Campeche ya no cree en discursos. La inconformidad crece cada día y el informe que se presentó podría ser el catalizador de una mayor presión social. Porque cuando la mentira se institucionaliza, el pueblo termina por decir basta.